A veces escribo cartas... es parte de una letra de "EL ultimo de la fila". Cierto es, las cartas que me escribía a mi mismo fueron terapia para mi, los demás no entendían, tampoco me importaba, poco a poco fui aprendiendo que las cosas importantes siempre las haces solo, y al mismo tiempo emprendía que la verdadera libertad no es entre tu físico y los obstáculos solidos. tu libertad empieza en tu cabeza y sigue por la medula a tu corazón...maldita sea! he convertido la libertad poética en libertad física otra vez!....quizás el sentimiento si necesita de un físico.....aunque solo comprenda las reacciones química de tu cerebro.
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